Tarta de leche condensada, chocolate y Arbol de Navidad

¿No os ha pasado haber tenido un sueño tan real que pareciera que estuvierais haciéndolo de verdad?

Esos sueños en los que te encuentras tan adentro de la historia que es difícil saber con certeza si lo que se hace en esos momentos esta pasando realmente o simplemente estas dormida y es todo producto de tu imaginación....

Seguro que a much@s de vosotr@s os ha pasado y sabéis a lo que me estoy refiriendo...

Eso mismo es lo que me pasó hace unos días...

Creo que todo vino por la casita de jengibre que publique en el post anterior..

La noche de la publicación fue cuando se produjo todo...

Me encontraba en una aldea donde todo todo todo estaba construido con chuches y dulces, el suelo que pisaba, las piedras, casitas, flores...

Todo era comestible, el aroma era increíble (todavía lo recuerdo) y la gente que habitaba la aldea era chiquitita, eso me incluye a mi también...

Al parecer vivía allí desde hacia tiempo, nuestro trabajo era mantener la aldea y ir construyendo toda clase de muebles, arboles y lo que se nos ocurriera utilizando el único material que teníamos...

Montones y montones de chuches de todas clases habidas y por haber, bastones de caramelo, discos de regaliz, piruletas enormes, sugus, chimos....¡¡Dios mio vivir allí era una pasada!!

De repente un didgeridoo empieza a sonar...

Todos los aldeanos empiezan a cantar, se abrazan...Yo no entiendo nada...

Todo queda a oscuras y ya no puedo ver a nadie, los oigo pero nada más...

Inesperadamente una música de fondo se escucha, agradable, navideña...Todo queda en silencio...

Una pequeña luz empieza a brillar, cada vez con más intensidad...

De pronto, todo se hace de día y puedo ver algo delante de mi, algo enorme, inmensamente grande que me deja sorprendida y es cuando empiezo a comprender todo...

Era 4 de diciembre y el árbol de navidad se encendía por primera vez en la aldea como cada año en esas fechas, el árbol media casi 3 metros (aquí mezcle totalmente el encendido de Rockefeller Center
en New York), era enormeeeee y estaba repleto de luces de caramelo, muñequitos de azúcar y cubierto de merengue...

De inmediato una música muy fuerte empieza a sonar, cada vez más intensa...Y es ahí cuando mis ojos se abrieron y me di cuenta de que realmente había sido un sueño y mi despertador me estaba avisando de que empezaba un nuevo día y que tenía que despertar...

Increíble...De verdad que estuve horas pensando y pensando, era tan real...
Así que, ya me conocéis, no podía dejar escapar este sueño y no hacer realidad una pequeña parte de lo que había allí...

Los bizcochos son de leche condensada y chocolate, si si, habéis leído bien, la esponjosidad que le proporciona la leche condensada al bizcocho es brutal, increíblemente delicioso...Y que mejor dulce que utilizar este como ingrediente principal.

Os aconsejo que lo hagáis, seguro que lo pasáis pipa y que disfrutáis comiéndolo.

¡¡Mil besazos navideños para tod@s vosotr@s!!

Tarta de leche condensada y chocolate mágica:

6 huevos L
400 g de leche condensada Nestle
80 ml nata
2 tabletas de chocolate negro Nestle Dolca
50 gr de azúcar
200 g de aceite de girasol
500 g de harina
2 cucharadas de polvo de hornear

2 cucharadas de extracto de vainilla 

2 cucharadas de cacao en polvo

 

Ingredientes Merengue Italiano:

450 g de azúcar
150 g de agua
9 claras de huevo
12 gotas de zumo de limón
1 pizca de sal


En un bol mezclamos harina, cacao y levadura, tamizamos y reservamos.
Partimos en trozos las 2 tabletas de chocolate negro (podemos ayudarnos de un rodillo)
Batimos el azúcar con los huevos hasta que se hayan integrado.
Incorporamos el aceite, la leche condensada y seguimos batiendo hasta su completa integración.(Quedará liquido, es normal)
Incorporamos la harina (que habíamos reservado con el cacao) poco a poco alternándola con la nata, mientras batimos hasta su completa integración.
Finalmente añadimos el chocolate a trocitos y removemos manualmente.
Incorporamos la masa a los moldes (previamente engrasados) y horneamos a 175ª durante 50, 60 minutos.

Los moldes que he utilizado son:
2 de 10 cm
2 de 18 cm
2 de 20 cm
2 de 25 cm

Preparación Merengue Italiano:

Poner el agua y el azúcar en un cazo, y dejar hervir durante 15 minutos aproximadamente. Si tienes termómetro estará listo cuando alcance la temperatura de 110º. Si no tienes, verás que está listo cuando coja el punto de bola (empieza a espesar). Retirar del fuego y reservar.

Montar las claras en un bol, con el zumo de limón, y la sal. Sin dejar de batir, ir incorporando el almíbar caliente. Seguir batiendo hasta que esté muy duro y brillante.
Teñir al gusto, yo utilice verde pero podéis hacerlo rosa!! Jajajjajaja